por Desde hace más de una década que las fuentes de energía alterna comenzaron a crecer, y hoy en día lo siguen haciendo. Sin embargo ¿Te has puesto a pensar porque estas soluciones aún no las vemos día con día en los hogares? La respuesta es sencilla: aún no nos hemos dado cuenta de lo útil que es empezar a producir energía de forma doméstica.
La energía por sí misma es necesaria para la vida; pero en nuestra sociedad la energía eléctrica es casi igual de imprescindible: para lavar la ropa, preparar nuestros alimentos, e incluso para poder ver en nuestros hogares durante la noche. Es impresionante ver cómo la tecnología nos ha traído tantas comodidades, pero también nos ha vuelto más y más dependientes de la electricidad. Una vida sin computadoras, radios, smartphones, o cualquier otro gadget es prácticamente difícil de imaginar.
¿Cuál es el inminente problema?
Y es aquí donde empieza el problema: mientras que los combustibles fósiles siguen agotándose, la adquisición de tecnologías verdes no logra aún suplir la demanda; lo cual nos lleva a un solo escenario, escasez de energía eléctrica. Quizá suene descabellado, pero no lo es, y no estoy hablando de que una ciudad entera se vaya a quedar sin abasto, simplemente al hecho de que los precios seguirán en aumento, y aumentarán cada vez más rápido conforme los combustibles fósiles sean más difíciles de encontrar y extraer.
En pleno siglo XXI hay quienes aseguran tener una solución radical: darle la espalda a la electricidad, abandonar las tecnologías y regresar a lo rudimentario… pero aceptémoslo, nadie quiere regresar a iluminar sus hogares con velas, o a lavar la ropa con piedras en un río. Amamos la electricidad y dependemos de ella, y esa es la razón primordial por la que necesitamos encontrar soluciones.
¿Dónde está la solución?
Los métodos alternativos para generar electricidad han tenido grandes avances y hay quienes hoy en día logran abastecer su hogar 100% durante todo el año. Se han olvidado de tener que pagar facturas, y de tenerse que preocupar sobre los precios de los combustibles. La mayoría de estos casos consisten en paneles solares, que si bien son costosos, su precio sigue disminuyendo año con año.
Los paneles solares son la solución más popular, pero existen otras; incluso hoy en día hay guías y métodos DIY (Do it yourself) que te permiten obtener algo de energía con una inversión mínima de dinero (y teniendo un poco de conocimientos en el tema).
La energía solar es prácticamente ilimitada, y una Buena instalación puede permitir que todos los electrodomésticos funcionen adecuadamente, puede mantener la calefacción el aire acondicionado, y también cargar todos nuestros gadgets. Y también pueden funcionar de noche, existen también docenas de baterías solares las cuales pueden almacenar los excedentes generados en el día, y con un convertidor DC/AC convertirlos nuevamente en suministro eléctrico para el hogar.
Unas últimas palabras
Quizá ya conocías todo lo que he dicho en esta publicación, pero considero necesario mantener en mente dos cosas: la energía a base de combustibles podría alcanzar su límite dentro de las próximas 3 décadas, y mientras más esperamos para optar por una solución ecológica mayor es el precio que pagaremos por tener energía en nuestros hogares ¿Quizá este año sea un buen momento para prever y ahorrar?
